jueves, 26 de noviembre de 2009

Código Unico ambiental de Entre Ríos

Finalizamos su lectura y evaluación. A la brevedad podremos publicar nuestras opiniones y aportes

2º Seminario de Concientización sobre el Impacto de los Agroquímicos

Se realizará este seminario el próximo sábado 28 de noviembre en Basavilbaso organizado por el Grupo Ambiental Basavilbaso.
Estaremos allí.

Selecciones del Reader Digest


Queremos expresar nuestra alegría y sano orgullo porque nuestro grupo ha sido mencionado en uno de los artículos de la última edición (noviembre) de la revista Selecciones. (página 50)

Nuestro agradecimiento a Nora por habernos contactado, a Graciela por acercarnos la revista y a todos quienes nos avisaron y se alegraron con nosotros.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Conclusiones de la Charla - Debate


Luego de la exposiciones de Américo Schvartzman y Javier Rossi, sobre la Nueva Constitución Provincial y su mirada ambiental, y el proyecto de Código ambiental de Entre Ríos, trabajaron seis grupos de entre seis y diez integrantes cada uno, que participaron también de la puesta en común y nos dejaron sus reflexiones por escrito.

En cuanto a las problemáticas ambientales que se perciben como más urgentes y especialmente en Larroque, se nombran: (entre paréntesis se anota la cantidad de grupos de que hacen referencia al tema)

Fumigaciones aéreas (4).
Tala del monte natural, deforestación (4)
Escasez de agua (4). Mal uso o uso abusivo del agua potable (3).
Recalentamiento global, cambio climático (3)
Los monocultivos (3)
Poda indiscriminada de los árboles (3)
Uso indiscriminado de agroquímicos; campos sembrados cercanos al casco urbano (2)
Contaminación del aire, olores desagradables (2)
Contaminación del agua (2); Mal tratamiento de efluentes cloacales volcados al arroyo (2).
Frigorífico (2); Baterías Villa (2); Fábricas dentro de la ciudad (1).
Contaminación de las papeleras (1)
Efluentes de fábricas y empresas locales. (1)
Aumento de patologías o enfermedades graves en jóvenes y niños (leucemia, tumores, cáncer). (1)
Complicaciones en vías respiratorias y piel. (1)
Explotación de los minerales y recursos no renovables (1).
Empresas que usan tecnología contaminante amparándose en que generan fuentes de trabajo (1).
Depósitos con pesticida en el ejido urbano y manipulación de venenos en el pueblo. (1)
Basura tirada en cualquier lugar (1)
Degradación del suelo (1)

En lo referente a las acciones o conductas que deberíamos implementar en lo personal, se destacan:
Cuidar el agua (3)
Plantar árboles (2)
Desarrollar el compromiso en los ciudadanos pensando en un mundo mejor. (2)
Concientizar a la población (2); Educar en el desarrollo sustentable. (1)
Información clara sobre estos temas. (1)
Tomar conciencia de la problemática ambiental (1); Cuidar el ambiente como cuidamos nuestra casa (1)
Exigir a las autoridades que cumplan con las reglamentaciones vigentes (1).
Producción natural, quintas comunitarias (1); Volver al arado a caballo (1)
Que los desagües pluviales no se vuelquen a las cloacas. (1)
Traslado de las fábricas y plantas de silos fuera de la ciudad. (1)
Separar residuos (1); Utilizar materiales degradables (1); No tirar la basura en cualquier lado (1)
Usar más la bicicleta y menos el auto (1)

El último punto de trabajo sobre lo que debería contemplar el Código Ambiental y cómo debería hacerlo fue el menos trabajado por falta de tiempo, en general se pide que:
Cree obligaciones y derechos; Establezca multas negativas (SIC)
Cree mecanismos jurídicos que resguarden nuestros derechos.
Incentive la participación ciudadana en la exigencia del cumplimiento de nuestros derechos.
Que evite la CORRUPCIÓN, que sea claro evite las ambigüedades y subterfugios.Que tienda a actuar antes que sea tarde (prevenir más que curar).

viernes, 6 de noviembre de 2009

Erisictón

La “sociedad de mercado” se limita a masticar todas las cosas sin apenas mirarlas, porque para mirar primero hay que poder pararse un segundo, y pararse es precisamente lo que nunca permite la sociedad capitalista. La sociedad consumista es una sociedad de pura hambre, y el hambre siempre es “rápida, repetida y mortal”, e infinita. No hay tiempo para usar las cosas, para mirarlas, para hacerlas humanas, las cosas no se detienen.
Buena parte de la argumentación se teje con la mira puesta en el mito del sacrílego Erisictón, que es condenado (por haber cortado un árbol) a padecer un apetito insaciable, a sufrir un hambre que nunca puede saciarse, que nunca se detiene, un hambre infinita que no se puede jamás calmar, que no se detiene ante nada, que más desea cuanto más introduce en su vientre, digestión sempiterna, metabolismo brutal, “toda comida en él es causa de más comida”, ese es su castigo, ese ciclo infinito del hambre, esa rueda infinita del apetito insaciable siempre renovado y nunca satisfecho, esa ausencia de fin: eso es el infierno para un griego, ese proceso inacabado. Contra ello construyeron la polis, y a ello nos devuelve ahora la sociedad del puro consumo. El capitalismo es un infierno griego.
Nada es suficiente para Erisictón, nada puede saciar su apetito infinito, lo devora todo, sus bosques, sus casas y hasta su propia hija, es un deglutir imparable que no distingue nada, que no contempla nada… Finalmente empieza a devorarse a sí mismo entre gritos de dolor, se arranca sus miembros y su carne a mordiscos, “y el infeliz alimentaba a su cuerpo disminuyéndolo”. Ahí queda mostrada la monstruosidad, y con ella la advertencia.
El capitalismo tiende a producir un estado de “antropología cero”, pues apenas deja construir un mundo, las cosas ya no tienen tiempo de solidificarse y permanecer en medio de esa tormenta biológico-mercantil, las cosas no tienen ni tiempo de morir, el hambre es rápida, no deja constituirse al objeto, pues para poder mirar las cosas hay que renunciar a comérselas, y el capitalismo se lo come todo. El tiempo del capitalismo es un tiempo de cataclismo, de renovación catastrófica. Nada tiene raíz, nada arraiga, todo lo que aparece ante nuestros hiperestimulados ojos hechizados, sucumbe rápidamente en el desfile mercantil del ciclo aparición-renovación. “Nada dura. Nada arraiga en el cosmos. En el Mercado, las cosas se suceden a tal velocidad que no nos da tiempo a agarrarlas”. Las cosas son siempre una exterioridad efímera, una transitoriedad inconsistente que resbala sobre nosotros sin dejar huella, ni memoria, ni uso, ni vejez, ni relato. Los objetos dejan de ser portadores de cultura, dejan de ser soluciones humanas a problemas humanos.